Por Brenda Hernández
Hermosillo, Sonora. 20 agosto 2021. La pandemia por COVID 19 ha traído consigo crisis, dolor y sufrimiento, pero también amor, empatía y solidaridad al mostrar el lado más humano de las personas cuyo rostro no se ve por el cubrebocas pero si deja al descubierto el corazón.
Tal es el caso del equipo medico, los primeros respondientes ante una emergencia.
Una, que el pasado martes en Magdalena de Kino cimbró la vida de cuatro paramédicos de brigadas del sol quienes después de 17 meses trasladando y atendiendo a mas de 500 pacientes adultos con covid recibieron el llamado de auxilio para trasladas a una niña de 9 años en situación muy grave.
El destino, el hospital Infantil de Hermosillo, un situación delicada y desgarradora, Ximena ya no podía respirar.
Ahí empieza la labor del paramédico David Mendoza responsable del traslado y del equipo que lo acompañaría, Ximena no resistiría el trayecto y se tomó la decisión de intubarla, el camino fue largo, muy largo, Dios estuvo ahí, narra David, a quien la voz se le quiebra pues Ximena luchó con todas sus fuerzas resistiéndose a ceder ante el virus.
Para David este primer caso pediátrico le cambió la vida al no entender como un ser humano tan indefenso se debatía entre la vida y la muerte, el virus parecía no atacar a los niños pero no es así.
La hermosa princesa llegó al hospital donde un equipo de profesionales ya la esperaba, los Brigadistas del Sol la despidieron, lucha Ximena, fue el mensaje de aliento, sin embargo la pequeña no resistió, falleció la mañana de viernes.
David y su equipo de voluntarios valientes hasta donde han podido hicieron todo lo humanamente posible por salvar la vida de la pequeña ese es el compromiso de la asociación, brindar asistencia humanitaria gratuita pues la movilización, los recursos e insumos los proporciona la ciudadanía con una ambulancia que les fue donada.
Brigadas del sol “Fraternidad en la emergencia”.
